Domingo, 14 de marzo.Antonio Estupiñán*
El camping de Playa de Vargas, en el litoral costero de la Villa de Agüímes, ubicado entre los típicos barrios residenciales de Lago Edén y el Oasis, y como pórtico la misma playa, tiene una extensión de más de 130.000 metros cuadrados y está preparado para acoger a más de 400 usuarios.
La instalación es modélica en su contorno urbanístico, preparado para esta zona de los vientos alisios, así como el contraste entre la construcción típica a base de materiales con semejanza a la geología propia de este terreno calcáreo y cubierto de lava volcánica-bermeja. Dentro de su zona verde se incorporan diversas variedades de cactus, palmeras y plantas autóctonas que pueblan su interior, mientras en las zonas limítrofes al camping, destacan diversas variedades de tabaibas, veroles, balos y plantas endémicas propias de la zona, lo que les dan un clásico colorido verde-blanco-rojizo, propios de las famosas construcciones del que fuera inolvidable y llorado lanzaroteño César Manríquez.
El camping público de Playa de Vargas está completamente terminado, pendiente de algunos retoques, y su coste fue cercano al millón de euros, aportados en buena parte por la Viceconsejería de Turismo y Transporte del Gobierno de Canarias.
Al visitante le llama poderosamente la atención los numerosos y vistosos círculos constructivos como protectores de vientos para el deleite y disfrute de los usuarios. En su interior existe un gran espacio para alojar más de veinte caravanas. Asimismo, posee todo lo necesario de cara a sus diversas necesidades, tales como espacios para asaderos al aire libre, diversas canchas deportivas, aseos, lavaderos, un comedor-cocina y un local habilitado donde irá una cafetería, estando también preparado para albergar un mini mercado.
Este pintoresco camping tendrá una doble finalidad (según se desprendió en su día sobre la habitabilidad del mismo), que es la que ocuparían los usuarios propiamente dichos y los grupos colectivos de ámbito deportivos y culturales, incluidos escolares de nuestra isla, para el uso y disfrute en plena naturaleza y la cercana playa para el deporte del windsurf, una de las mejores en su climatología para la práctica de este deporte de las olas.
Hace más de una década, el camping de la Playa de Vargas figuraba, en su apartado tercero, en las propuestas del famoso Plan Especial de Ordenación del Litoral de Agüimes, promovido por el Ayuntamiento de Agüimes, con la colaboración de la Demarcación de Costas de Canarias (MOPU) .
Contra todo pronóstico, y pese a la alegría que suscitó hace varios años la inminente apertura de este camping, aún no ha sido inaugurado, lo que ha supuesto numerosas críticas hacia los organismos responsables en la materia.
El pasado temporal del mes de febrero, con vientos de más de 100 kilómetros/hora, hizo varios destrozos, y lo que en su día fue una espléndida vista, ahora resulta todo lo contrario, con síntomas de abandono, lo que motivará un serio peligro (por lo solitario del lugar) para los amantes de lo ajeno, ya que tiene fácil accesos a su interior. No comprendemos como se invierte un elevado gasto económico para uso y disfrute de los habitantes de la Comarca del Sureste y en general de toda Gran Canaria, dado los escasos lugares para campings, para que, sea las causas que fuese, esté abandonado y sin darle el verdadero cometido que en su día, a bombo y platillo, se anunció.
*Antonio Estupiñán es ex decano de la prensa escrita en Gran Canaria.
