El pasado viernes tuvo lugar, en la sede del Club de Mayores de San Mateo, la XII edición del Encuentro de Bibliotecarios Municipales de Gran Canaria, que reúne a los técnicos responsables de las bibliotecas públicas de la isla, con la finalidad de intercambiar experiencias en el modelo de gestión de dichos centros, vitales para el desarrollo cultural de los ciudadanos. El encuentro utilizó como eje temático vertebrador las nuevas estrategias y dinamización para el fomento de la lectura. Estos encuentros se manifiestan como un útil foro de debate y reflexión en el que los bibliotecarios de la isla intercambian experiencias, comparten recursos y unifican criterios, propiciándose de esta manera la formación y el reciclaje de un sector profesional que agrupa a casi un centenar de técnicos, según datos facilitados por la Asociación de Bibliotecarios de Gran Canaria, entidad de reciente constitución, y que preside el Coordinador de la Red de Bibliotecas Municipales de Agüimes, Diodoro Santana (en la imagen), y cuya presentación se formalizó en la citada jornada.
En el programa participaron diferentes especialistas de algunos centros y experiencias peninsulares de referencia, como la Fundación Germán Sánchez Ruipérez de Salamanca, que desarrolla el proyecto denominado "Territorio E-book, lecturas sin fin", o Urueña, la primera Villa del Libro de España.
Al Encuentro de Bibliotecarios Municipales de Gran Canaria asitieron unas 64 personas de 18 bibliotecas, entre las que figuran la mayoría de bibliotecas de titularidad municipal, la Biblioteca Insular de Gran Canaria (gestionada por el Cabildo grancanario), la Biblioteca General de Estado, la de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria y la Biblioteca de Arona (Tenerife).
Las cuestiones que se abordan cada año son elegidas por los bibliotecarios municipales que se reúnen trimestralmente y cada biblioteca asume la responsabilidad de gestionar las respuestas a cada encuentro.
El anterior encuentro se celebró en Valleseco y, según Zoraida Rodríguez, responsable del Plan de Fomento de la Lectura Leer es Vital, de la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico y Cultural del Cabildo de Gran Canaria, el objetivo principal de los mismos "es mejorar el servicio de los centros bibliotecarios y la actualización permanente de los profesionales bibliotecarios. El Cabildo de la isla, a través de la Consejería de Cultura y Patrimonio Histórico y Cultural, como es habitual, contribuye con todos sus medios para el éxito de estos encuentros".
Para la responsable del Plan de Fomento de la Lectura de la Corporación insular, "es difícil evaluar o valorar en el corto plazo, la implementación de las medidas adoptadas en estos encuentros o la repercusión en la gestión o política bibliotecaria en cada uno de los centros, aunque sí es constatable que podemos hablar de evidentes avances o mejoras a partir de estos encuentros y otro tipos de experiencias similares, y cito dos ejemplos relevante: el incremento de clubes de lectura en general en la isla, o la formalización de la Asociación de Bibliotecarios de Gran Canaria".
José Alberto Quintana Herrera, vocal de la asociación y Coordinador de la Biblioteca Municipal de Carrizal de Ingenio, presentó un balance que resume los doce años de encuentros bibliotecarios que, hasta la fecha, han tenido lugar desde que se iniciaron en el municipio de Arucas, comparando la situación en la que se encontraban los centros en aquella época, con las nuevas perspectivas que han abierto las herramientas digitales y la creciente demanda de la sociedad. "Los años han permitido una mayor visibilidad de las bibliotecas en el contexto de la sociedad", asegura Quintana, que defiende "el papel y la función dinamizadora en el sector de la cultura que cumplen estos centros en la actualidad".
Para el Presidente de la Asociación de Bibliotecarios de Gran Canaria, Diodoro Santana, la citada entidad tiene "el reto de consolidar los derechos de los bibliotecarios, así como la dignificación de su protagonismo como interlocutores culturales. Deseamos que se mejore la calidad de los servicios que se prestan a los usuarios, incidir en la necesidad del reciclaje profesional del personal y mantener un contacto más directo y fluido con las instituciones y entidades en las que operamos, entre otras aspiraciones".
Para Santana, estos doce encuentros también han sido muy beneficiosos y operativos "porque han servido para intercambiar experiencias, conocer problemáticas similares, aproximar realidades y planificar estrategias en el marco de las bibliotecas", concluyó.
