Los usuarios-as del Programa de Respiro Familiar, durante una de las actividades lúdicas desarrolladas en la Piscina Municipal de Agüimes |
18 menores, de distintos barrios del municipio de Agüimes, con
necesidades educativas especiales y con discapacidad,
física y/o psíquica, participan en el Programa de Respiro Familiar que
la Concejalía de
Servicios Sociales del Ayuntamiento de Agüimes pone en marcha desde hace doce años.
El proyecto de Respiro Familiar está dirigido a menores de 21 años con necesidades
educativas especiales integrados en aulas enclaves y en
centros específicos, así como menores diagnosticados de hiperactividad u otros
trastornos de conducta, menores pendientes de valoración por el centro base de
Atención a Personas con Discapacidad y Menores con Dictamen del IMSERSO.
El programa da prioridad a las familias, generalmente monomarentales, con alguna
otra discapacidad física o psíquica; con necesidades de formación sobre la
discapacidad; con recursos económicos escasos; con enfermedades crónicas
graves, que requieran hospitalización o tratamientos prolongados; con otras
cargas familiares, como ser familias numerosas, ser únicas cuidadoras o tener a
cargo a mayores dependientes.
El objetivo de
este programa es ofrecer, en los meses de vacaciones, actividades lúdicas,
formativas y socioeducativas que rellenen el tiempo de ocio de estos menores,
además de recibir atención educativa que dé continuidad a la labor realizada
durante el curso, dirigida a potenciar su autonomía personal y la integración
del menor con discapacidad en su entorno, a la vez que permite un descanso a la
familia durante unas horas al día.
El Programa de Respiro Familiar se desarrolla durante los meses de julio y agosto, en horario
de 08.00 a 13.30 horas, en el Centro de Educación de Infantil y Primaria Roque
Aguayro de Agüimes, donde se desarrolla un
programa que contempla una agenda personalizada con actividades lúdicas,
formativas e integradoras, en las que se trabaja aspectos
relacionados con la discapacidad física y temas relacionados con la
discapacidad psíquica.
Un equipo de 4
profesionales trabaja con la población infanto-juvenil que participa en
este proyecto, en el que se imparten numerosas actividades: manualidades,
juegos, psicomotricidad y hábitos de aseos; entre otras muchas. La jornada
comienza con una asamblea para organizar el día y finaliza con la relajación.
Además se
realizan numerosas actividades fuera del centro: sesiones en la piscina
municipal con personal especializado; salidas a los parques, playa y calles del
pueblo.
Las personas usuarias de este programa disponen, además,
de un transporte adaptado para facilitar el servicio a las familias del
municipio.
El Programa de Respiro Familiar se inició en el año 2001 como recurso para dar respuesta a unidades familiares
que demandan apoyo y atención. Esta demanda se detecta a través de la
asistencia al Departamento de Servicios Sociales solicitando apoyo para poder
atender las necesidades de sus hijos e hijas durante los meses de verano.
En este
sentido, este tipo de programas son fundamentales ya que, acabado el período
escolar, lo que se pretende con este proyecto es continuar trabajando la
integración del menor con discapacidad de forma que no se vean limitadas
sus opciones de actividades tanto sociales como lúdicas-formativas. Para ello
se disfruta de todos los recursos deportivos, culturales y de ocio existentes
en el municipio.
Entre los objetivos específicos se pueden destacar:
-Favorecer el acompañamiento a las familias en la atención al menor con
discapacidad, dotándolos de estrategias que mejora la convivencia familiar
durante los meses de verano.
-Facilitar la conciliación de la vida laboral y familiar para que puedan
obtener ingresos económicos.
-Lograr el afianzamiento de los objetivos a nivel educativo que promocionan su
autonomía personal como resultado del cambio en las rutinas diarias y la pérdida
de la disciplina profesional durante un período largo.
-Servir de apoyo a las necesidades de formación de las familias en todo lo
relativo a la discapacidad, así como en la atención social, personal y de ocio
del menor.
-Promover la integración social de los menores, trabajando en grupo
y favoreciendo la participación de los menores en actividades que promueven el
aprovechamiento de los recursos de la zona a nivel deportivo social, cultural
así como su divertimento con la implantación de las distintas
actividades.
-Desarrollar un programa de actividades variadas y lúdicas que potencien
la diversión y el enriquecimiento personal de todos los menores que se
beneficien del mismo.