24 de diciembre de 2015

La Guardia Civil inmoviliza 8.453 kilos de alimentos y 53 litros de aceites y vinagres en Agüimes

Parte de los alimentos y bebidas intervenidos (Foto: Guardia Civil)
Jueves, 24 de diciembre.

Redacción
La Guardia Civil ha desarrollado una operación en todo el territorio nacional que ha llevado consigo la retirada del mercado de productos de alimentación y bebidas comercializados de manera irregular y, en muchos casos, productos típicos de consumo en estas fechas navideñas.
En términos cuantitativos, se han intervenido 102.440 kilos de alimentos y cerca de 270.000 litros de bebidas, 65.176 pastillas edulcorantes y 752 jamones que, de haber entrado en el mercado, hubieran supuesto un grave peligro para la salud.
En total, se han realizado 1.714 controles e inspecciones, resultando como infractores 684 personas. Además, durante el desarrollo de la operación se han esclarecido seis delitos, por los que se han detenido a 8 personas y se ha investigado a otras 16.
La operación, de alto impacto, ha sido llevada a cabo con el objetivo de detectar actividades irregulares en unas fechas donde el incremento del consumo provoca la puesta en el mercado para su venta y utilización de productos de alimentación de baja calidad, así como la vulneración de la normativa existente en materia de almacenamiento, distribución de productos de calidad diferenciada y la falsificación del etiquetado y contrabando de estos productos.
Entre los principales productos alimenticios figuran pescados, mariscos, conservas, carnes, embutidos, lácteos, quesos, dulces, fruta fresca, bebidas alcohólicas, refrescos y aceites.
El dispositivo contó con la participación de casi 2.000 guardias civiles, entre los que se encuentran agentes del Servicio de Policía Judicial, del Servicio de Protección a la Naturaleza, del Servicio Fiscal y de Fronteras y de unidades territoriales repartidas por toda la geografía nacional.
La problemática asociada a la seguridad alimentaria afecta a varios ámbitos sociales y bienes jurídicos de relevancia internacional y de especial sensibilidad social que es objeto de interés por parte de las diferentes autoridades, puesto que puede conllevar un grave riesgo para la salud de las personas.
La Secretaría General de INTERPOL, en colaboración con EUROPOL, coordina a nivel internacional, desde el año 2011, operaciones que se centran en la lucha a nivel mundial contra la producción, adulteración, falsificación y tráfico de alimentos, incluyéndose los protegidos por la Propiedad Industrial e Intelectual.
Los objetivos de estas operaciones son proteger la salud pública; luchar contra los grupos organizados dedicados al comercio ilegal de productos alimenticios falsificados; potenciar la cooperación internacional entre las fuerzas de seguridad y las agencias reguladoras de productos alimenticios; y mejorar la cooperación con las empresas privadas pertenecientes a la industria alimenticia.
Parte de los alimentos y bebidas intervenidaos (Foto: Guardia Civil
Con estas iniciativas se pretende dar cumplimiento a la legislación internacional en esta materia y, en particular, a la normativa europea en lo que se refiere a la protección de la salud pública y de los consumidores, así como a la lucha contra este tipo de delincuencia basada en el comercio de comida y bebida falsificadas o que no reúnen los requisitos legales para el consumo humano.
Por ello, las principales actividades que son objeto de los controles o investigaciones que se ponen en marcha en el marco de estos dispositivos son la producción, envase, transporte y distribución de este tipo de productos.
Para llevar a cabo las operaciones es fundamental la coordinación y el intercambio de inteligencia entre los diferentes países participantes y, muy especialmente, a través de los mecanismos establecidos por INTERPOL y EUROPOL. Asimismo, se cuenta con la colaboración de representantes y expertos de empresas privadas que asesoran a los agentes en cuestiones técnicas y legales relativas a los requisitos que deben reunir los diferentes productos que se comercializan.
Durante la campaña de control en la provincia de Las Palmas, se actuó en un almacén y una herboristería de Mogán, dos carnicerías de Santa Lucía y una empresa de distribución de productos italianos en Agüimes.
En esta última, una patrulla del SEPRONA de la Guardia Civil de Vecindario, en coordinación con la Patrulla Fiscal de Fronteras (PAFIF), procedieron a realizar una inspección el pasado día 4 de diciembre en la empresa, donde se encontraron productos a la venta que carecían de etiquetado español. En total, se intervino 8.453 kilos de alimentos y 53 litros de aceites y vinagres, valorados en 8.604 euros, repartidos entre 1.390 kilos de harina, 820 paquetes de pasta, 10 kilos de sémola, 140 envases de aceite de oliva, 18 litros de vinagre balsámico y 1.984 envases de tomate triturado.