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| Natalia Rodríguez, en una imagen de archivo |
Redacción
Algo más de dos meses de baja es el tiempo que necesitará Natalia Rodríguez para recuperarse de la rotura de menisco que le obligó esta semana a pasar por el quirófano.
Desde el inicio de la pretemporada, la joven agüimense sufría unas molestias en el lateral de la rodilla que se diagnosticó como una tendinitis, aunque fue a raíz del primer partido en el Open Day de Torrejón cuando se intensificó el dolor. "Me dolía mucho y no podía ni doblar la rodilla", recuerda la jugadora en Diario de Ferrol.
Por ello, se sometió a nuevas pruebas que ya presagiaban el alcance de la dolencia. "Tenía el runrún ahí de que podía ser algo peor", asegura, y fue la resonancia magnética lo que confirmó la rotura de menisco externo de su rodilla derecha.
Tras la artroscopia a la que fue sometida por el traumatólogo Isidro González, a la jugadora le esperan dos o tres semanas por delante ante de que le retiren los puntos y, a partir de ahí, Natalia Rodríguez comenzará un trabajo progresivo de recuperación.
Es complicado hablar de plazos "porque me han dicho, explica la internacional agüimense, que depende de cada persona", aunque como mínimo serán ocho semanas las que esté alejada de las canchas. "Yo calculo que para después de Navidad, para la segunda vuelta, estaré perfecta", indica.
A pesar de tratarse de su primera lesión, Natalia Rodríguez se lo ha tomado con calma. "Estoy tranquila y bien de ánimos, aunque es un palo para mí y para el equipo, porque creo que estaba en una buena dinámica y podría ayudar", asegura la joven, que está acompañada en casa por su madre, Paqui Domínguez.
Y es que, efectivamente, Natalia Rodríguez había dado un paso al frente en los últimos meses y, tanto durante la pretemporada como en el primer partido de liga, había gozado de más minutos en cancha que el pasado año.