Sábado, 17 de julio.
La Guardia Civil del Puesto Principal de Agüimes, en colaboración con la patrulla del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de Vecindario, ha procedido a la detención de un vecino de Agüimes como presunto autor de un delito de maltrato animal.
Los hechos fueron puestos en conocimiento de la Guardia Civil por un testigo, quien afirmó que en una especie de finca llena de sobrantes estropeados de construcción, existían varios perros en condiciones incompatibles con la vida, sin ser atendidos y en aparente estado extremo de delgadez.
Por todo ello, los agentes de la Guardia Civil se trasladaron hasta el lugar, comprobando que los perros vivían atados a viejas cadenas y con chapas o palets como único cobijo para protegerse de las inclemencias meteorológicas, mientras que en los comederos solo existían restos podridos de lo que podrían ser sobras de comida, que desprendían un olor ácido insoportable.
Además de la extrema delgadez de los animales, se apreciaban callosidades de dormir en el suelo firme de la tierra y una grave infestación de parásitos en la piel.
De inmediato, se activó al equipo del SEPRONA de la Guardia Civil de Vecindario para proceder al urgente traslado de los perros al Albergue Municipal de Animales de Agüimes, donde pudieran recibir unos cuidados mínimos para la subsistencia.
Asimismo, se llevó a cabo la detención del responsable del cuidado de los perros, que manifestó que eran alimentados a diario, pero que mostraban un estado de salud, de aparente descuido, porque eran demasiado viejos.
