Martes, 7 de septiembre.
El Cabildo de Gran Canaria, en colaboración con la Asociación Insular de Desarrollo Rural (Aider), trabaja intensamente para poner en marcha antes de fin de año el Banco de Tierras de Gran Canaria con el objetivo de producir más y mejora, elevar el autoabastecimiento y potenciar el desarrollo agrícola, con todo lo que implica de conservación y de prevención de incendios.
Los técnicos de Extensión Agraria y Desarrollo Agropecuario culminan una aplicación informática que pondrá en contacto a los dueños de suelos cultivables con personas en disposición de trabajarlos para dinamizar el arrendamiento o cesión de fincas rústicas de uso agrícola, ganadero y agroforestal, así como incrementar la superficie aprovechada por el sector a nivel insular.
Según los datos del Mapa de Cultivos de Gran Canaria de 2019, la superficie agraria insular aprovechada solo ocupa un 38,83% y el 61,16% está sin cultivar, lo que significa que hay 11.280 hectáreas cultivadas frente a 17.762 en desuso, de las que 15.643 presentan un abandono prolongado.
Los técnicos del Cabildo de Gran Canaria visitarán, valorarán y elaborarán una ficha de cada finca en desuso que se incluya en el Banco de Tierras de Gran Canaria para que los interesados puedan conocer sus características a través de la app y cederá, por su parte, 13 hectáreas agrícolas y 22 ganaderas del Polígono Agropecuario de Los Corralillos a través de un concurso público para el que ya se está trabajando en los pliegos y en los reglamentos de uso de los terrenos.
Asimismo, ofrecerá información a los arrendatarios para quienes este sea su primer contacto con el sector a través de las agencias de extensión agraria y el personal del propio banco.
El Cabildo de Gran Canaria ha detectado un aumento de las personas interesadas en dedicarse al sector agrario con la crisis sanitaria y económica generada por el coronavirus, que ha hecho que la agricultura se vea como una buena opción de futuro.
Las nuevas incorporaciones al trabajo agrario, explica el Cabildo de Gran Canaria en una nota de prensa, se nutren de tres perfiles: jóvenes que ya tienen algún contacto con la actividad; otras personas con un contacto menor que se encuentran en situación de desempleo o que, teniendo trabajo, buscan sustituirlo por un proyecto en el campo; y quienes se dedicaban a ello a tiempo parcial y lo compatibilizan con su trabajo habitual y ahora han decidido hacerlo a jornada completa.
