Viernes, 24 de junio.
Canarias7
La Casa de la Cultura del Cruce de Arinaga seguirá formando parte del paisaje durante al menos un año más, ya que el Ayuntamiento de Agüimes se ha visto obligado a dar marcha atrás a los planes que se había trazado y anuncia que resolverá el contrato que firmó con la constructora que iba a levantar en su lugar un edificio singular que tendría las funciones de centro cultural, con una inversión prevista que ascendía a unos 4,7 millones de euros.
La ruptura no solo se produce antes incluso del comienzo de las obras, sino que traerá consigo la resolución de otros tres contratos vinculados a este, que suman, entre los tres, un valor de 923.000 euros, ya que la complejidad de la obra había traído consigo la licitación del proyecto en cuatro lotes: la demolición del edificio actual, la ejecución del nuevo centro, la dotación de instalaciones y la coordinación de seguridad y salud.
La decisión, señala el Alcalde de Agüimes, Óscar Hernández, ya está tomada y será aprobada en una próxima sesión de la Mesa de Contratación, a falta únicamente del preceptivo informe jurídico.
El motivo que alega el gobierno municipal es la presentación por parte de la empresa adjudicataria, Proyecon Galicia S.A., antes incluso de que empezaran las obras, de una propuesta de modificado del proyecto que no solo altera las características arquitectónicas del edificio inicial (por ejemplo, cambiar el acero por el hormigón), sino que, además, conllevaría un incremento del coste de las obras, y según indica Hernández, si bien aún no están cuantificados los cambios, tiene muy claro que implicarán un sobrecoste.
El primer edil agüimense confiesa que en cuanto supieron que había ganado el concurso se hizo una simple investigación y no hallaron demasiadas buenas referencias respecto a la forma de trabajar la constructora, aunque los informes técnicos le dieron mayor puntuación que al resto de aspirantes y se firmó con ellos.
"Antes de la firma les convoqué a una reunión para curarme en salud y advertirles que no íbamos a permitirles modificado alguno de la obra", manifiesta Óscar Hernández, que buscaba evitar contratiempos como los que el Ayuntamiento de Agüimes tuvo con la obra del Recinto Ferial del Cruce de Arinaga, convertido en un quebradero de cabeza que obligó también a la resolución del contrato con la empresa adjudicataria.
A Hernández, que recuerda que Proyecon Galicia S.A. resultó vencedora frente a otras diez empresas, "algunas de ellas de acreditada solvencia", le molesta que una empresa opte a la baja a un concurso, lo gane porque su oferta es la más económica y después pretenda alterarlo y encarecerlo antes de empezar.
En concreto, el presupuesto de licitación de la obra era de 6,4 millones de euros y Proyecto Galicia S.A. ofertó hacerla en 4,7, es decir, 1,6 millones de euros menos y "no pueden alegar que los precios han subido, porque cuando hicieron la oferta ya había pasado la etapa más crítica", apunta Óscar Hernández.
La resolución del contrato traerá en cadena la del suscrito con Preconte CYS 91 para la demolición del edificio actual; la de la dotación de las instalaciones del compleo con Ingemont Tecnologías; y la del de coordinación de seguridad y salud.
El Alcalde de Agüimes, Óscar Hernández, confiesa que ve complicado que las obras del nuevo edificio empiecen antes que acabe el mandato, de ahí la decisión municipal de reabrir después del verano la Casa de la Cultura del Cruce de Arinaga, que data de 1990, donde volverán las actividades que tradicionalmente ha venido acogiendo.
Hernández no oculta su "decepción", porque "este gobierno tenía puestas muchas ilusiones en un proyecto que iba a dar un salto de calidad en las infraestructuras públicas del Cruce de Arinaga".