Redacción
El Cabildo de Gran Canaria ha incoado expediente para la declaración como Bien de Interés Cultural (BIC) Inmaterial del Juego del Garrote tradicional de la isla, un deporte de origen prehispánico que presenta una serie de particularidades en relación a los juegos del palo, que lo diferencian de las modalidades practicadas en otras islas del archipiélago, lo que justifica su declaración como BIC de carácter insular.
La propuesta de la Consejería de Patrimonio responde a la instancia presentada en 2021 por la Fundación para la Etnografía y Desarrollo de la Artesanía Canaria (Fedac) al considerar que es una "manifestación sobresaliente del patrimonio inmaterial o intangible de la isla".
En su instancia, la Fedac resalta que esta manifestación cultural "está asociada a la cultura pastoril grancanaria, un legado que diferentes colectivos han rescatado, estudiado y siguen practicando en la actualidad en varias escuelas" de la isla.
Y enfatiza que esta modalidad es única en Canarias, diferenciándose de otras formas de juego con palos que se practican en otras islas, por lo que constituye una sobresaliente manifestación etnográfica merecedora de ser incluida en el Catálogo Insular de Bienes Patrimoniales Culturales, y, en definitiva, de ser declarada BIC de carácter insular.
La propuesta de la Fedac cuenta con el respaldo plenario de varios ayuntamientos, los de Vega de San Mateo, Santa María de Guía, La Aldea de San Nicolás, Arucas, Telde, Gáldar y Agüimes.
Cuenta también con un informe favorable de la Facultad de Geografía e Historia de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC), que detalla que la documentación histórica permite hacer un seguimiento del uso, fabricación y características del montante de palos o espadas de palo recio, astas largas como establece el historiador Marín y Cubas en su obra de 1694 desde épocas muy antiguas.
Su uso figura también en publicaciones como las de Abreu Galindo o Morales Padrón, así como en diferentes crónicas e incluso en La Dragontea de Lope de Vega.
"Creemos que se hace necesario asegurar que este tipo de tradiciones no se pierdan y tengan continuidad en la sociedad del presente y, sobre todo, del futuro", mantiene el informe de la ULPGC, que sostiene que este juego debió estar presente en todas las islas en algún momento de la historia de Canarias, pero en la actualidad solo pervive en algunas localizaciones, como la comarca sureste de Gran Canaria, en los municipios de Valsequillo, Telde, Santa Lucía de Tirajana y Agüimes, donde la práctica de esta modalidad pervive gracias a la Pila de Lucha del Garrote Egenenacar.
