Viernes, 5 de abril.
Durante el fin de semana se espera un tiempo anticiclónico estable en la mayor parte del país, con cielos nubosos, aunque la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) anuncia que podría llegar una lengua de polvo procedente del Sáhara que invadirá la Península y otros puntos del continente europeo durante los próximos días.
Así, buena parte de la España peninsular, el sur, este y la costa vasca, además de Canarias, sufrirá un calor anómalo con temperaturas que pueden llegar a superar los 30 grados de máxima, a lo que suma también la posibilidad de que se registren valores desfavorables en la calidad del aire.
Esta calima, sumada a las lluvias que se esperan de cara al fin de semana provocarán que veamos la denominada "lluvia de sangre", más popular como "lluvia de barro" por el color rojizo que tienen las gotas de agua al caer.
La irrupción de la calima se daría en el sudoeste peninsular, la región de Alborán y la provincia oriental del archipiélago canario, especialmente las islas de Fuerteventura y Lanzarote, que serán las más afectadas por este fenómeno, aunque también se dejará notar en Castilla-La Mancha, Extremadura o Madrid.
La Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) avisa que la cola de un frente podría dejar algunas precipitaciones al final de esta jornadas en el noroeste de Canarias, por lo que es probable que acabe cayendo la lluvia de barro que dará pie al resto de lluvias que verá el país.
A partir de mañana, es posible que la calima se extienda a gran parte de la Península con la entrada de un frente atlántico por el noroeste asociado a la borrasca Olivia, que traerá precipitaciones en Galicia, Asturias, el oeste de Castilla y León y gran parte del archipiélago canario.
