Miércoles, 25 de septiembre.
Redacción
Gran Canaria conocerá a principios de 2025 el potencial geotérmico que atesora en la Comarca del Sureste y que se usaría para producir electricidad, una vez que se culmine el primero de los tres sondeos que se realizarán en la zona, a 2.700 metros de profundidad, en un área de 36 kilómetros cuadrados.
Así lo anunció ayer el Presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, y representantes de las empresas Ayagaures Medio. Ambiente, del Grupo Pérez Moreno, Canary Islands Base, del Grupo Satocan y la británica especialista en perforaciones, Dando Drilling International en la presentación de Gran Canaria Geotermia SL, una alianza público-privada para avanzar en el aprovechamiento del potencial de la energía geotérmica en la isla.
Con un presupuesto inicial de 30 millones de euros, de los que 15 millones los aporta el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), este consorcio avanzará respecto de los primeros estudios sobre el potencial geotérmico de Gran Canaria que promovió en 2016 el Involcan "en un viaje al centro de la tierra de la isla", con el fin de aumentar su mix energético y contribuir así al proyecto de ecoisla que abandera su gobierno.
Se trata, según ha recalcó Antonio Morales, de aprovechar las fuentes de energía renovables "allí donde estén", como ha hecho Islandia y Azores, un desafío que en Europa lidera Italia y en el que también está embarcada Turquía.
Para ello, en una cuadrícula de 36 kilómetros cuadrados que se extiende por los municipios de Agüimes, Ingenio, Telde y Valsequillo, esta alianza público privada se propone hacer tres perforaciones en busca de energía geotérmica profunda, unos sondeos que comenzarán antes de que finalice el próximo mes de octubre y finalizarán el 31 de enero de 2025.
Será entonces cuando los promotores de este proyecto podrán validar el potencial geotérmico que tiene el subsuelo de esta zona de la isla, donde, según ha recordado el Consejero de Energía del Cabildo de Gran Canaria, Raúl García Brink, en 1979 se hizo la primera perforación, a 600 metros de profundidad, con este mismo fin.
Morales subrayó que la energía geotérmica es limpia, firme y flexible, de forma que una planta puede funcionar 24 horas, los siete días de la semana, aumentando o reduciendo su generación y generando, además, una huella muy pequeña, ya que no emiten gases de efecto invernadero.
Con el objetivo de explorar "el secreto del éxito de la transición energética de Islandia o Azores", la primera institución insular, junto a estos socios locales e internacionales, pretenden impulsar el cambio energético en esta isla.
Entre esos socios se encuentra Dando Drilling International, que comenzó su actividad en 1867 buscando pozos de agua y que se ha especializado en la fabricación de máquinas de perforación para investigar el subsuelo, en lo que trabaja en la actualidad en todos los continentes, lo que, a juicio de su director general, José Navalón, permitirá aportar experiencia a este proyecto.
"El coste de fallar en la geotermia es el más alto, por lo que podemos contribuir a mitigar riesgos" que puedan hacer peligrar una inversión como ésta, apuntó, al tiempo que ha asegurado que la geotermia "puede ser la energía base para la independencia energética de muchos países".
Navalón consideró, asimismo, que el primer sondeo dará una indicación clara del tipo de recurso que tiene la zona a explorar, si bien ha indicado que, en cualquier caso, se seguirá perforando porque los "pinchazos" siguientes pueden ser parte de la infraestructura a instalar.
Así lo anunció ayer el Presidente del Cabildo de Gran Canaria, Antonio Morales, y representantes de las empresas Ayagaures Medio. Ambiente, del Grupo Pérez Moreno, Canary Islands Base, del Grupo Satocan y la británica especialista en perforaciones, Dando Drilling International en la presentación de Gran Canaria Geotermia SL, una alianza público-privada para avanzar en el aprovechamiento del potencial de la energía geotérmica en la isla.
Con un presupuesto inicial de 30 millones de euros, de los que 15 millones los aporta el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), este consorcio avanzará respecto de los primeros estudios sobre el potencial geotérmico de Gran Canaria que promovió en 2016 el Involcan "en un viaje al centro de la tierra de la isla", con el fin de aumentar su mix energético y contribuir así al proyecto de ecoisla que abandera su gobierno.
Se trata, según ha recalcó Antonio Morales, de aprovechar las fuentes de energía renovables "allí donde estén", como ha hecho Islandia y Azores, un desafío que en Europa lidera Italia y en el que también está embarcada Turquía.
Para ello, en una cuadrícula de 36 kilómetros cuadrados que se extiende por los municipios de Agüimes, Ingenio, Telde y Valsequillo, esta alianza público privada se propone hacer tres perforaciones en busca de energía geotérmica profunda, unos sondeos que comenzarán antes de que finalice el próximo mes de octubre y finalizarán el 31 de enero de 2025.
Será entonces cuando los promotores de este proyecto podrán validar el potencial geotérmico que tiene el subsuelo de esta zona de la isla, donde, según ha recordado el Consejero de Energía del Cabildo de Gran Canaria, Raúl García Brink, en 1979 se hizo la primera perforación, a 600 metros de profundidad, con este mismo fin.
Morales subrayó que la energía geotérmica es limpia, firme y flexible, de forma que una planta puede funcionar 24 horas, los siete días de la semana, aumentando o reduciendo su generación y generando, además, una huella muy pequeña, ya que no emiten gases de efecto invernadero.
Con el objetivo de explorar "el secreto del éxito de la transición energética de Islandia o Azores", la primera institución insular, junto a estos socios locales e internacionales, pretenden impulsar el cambio energético en esta isla.
Entre esos socios se encuentra Dando Drilling International, que comenzó su actividad en 1867 buscando pozos de agua y que se ha especializado en la fabricación de máquinas de perforación para investigar el subsuelo, en lo que trabaja en la actualidad en todos los continentes, lo que, a juicio de su director general, José Navalón, permitirá aportar experiencia a este proyecto.
"El coste de fallar en la geotermia es el más alto, por lo que podemos contribuir a mitigar riesgos" que puedan hacer peligrar una inversión como ésta, apuntó, al tiempo que ha asegurado que la geotermia "puede ser la energía base para la independencia energética de muchos países".
Navalón consideró, asimismo, que el primer sondeo dará una indicación clara del tipo de recurso que tiene la zona a explorar, si bien ha indicado que, en cualquier caso, se seguirá perforando porque los "pinchazos" siguientes pueden ser parte de la infraestructura a instalar.