25 de febrero de 2018

Alerta máxima con petición de que la población no salga de sus casas

Domingo, 25 de febrero.

Imagen de archivo
Redacción
Durante la madrugada de ayer, se registró un nuevo desprendimiento en el kilómetro 2 de la carretera GC-550, entre Agüimes y Santa Lucía, producto de las lluvias caídas durante la jornada del viernes, y que obligó al personal del Servicio de Carreteras del Cabildo de Gran Canaria a actuar para despejar la vía, que quedó abierta al tráfico.
Mientras tanto, un tramo de la carretera GC-104, entre el Cruce de Arinaga y Los Corralillos, continúa cortada por la afección que volvió a sufrir un tramo de la vía, junto al acceso a la zona de El Lomo, y que ya se encontraba acotada en uno de sus carriles desde hace casi tres años y medio, cuando se resquebrajó por efecto de las lluvias de entonces.
Por otra parte, la segunda borrasca, de una serie de tres, llegará hoy a las islas y el Plan de Emergencias de Gran Canaria ha pasado a alerta máxima y, desde el Cabildo de Gran Canaria, se ha decidido pedir a la población que no salga de sus casas ante la imprevisibilidad del alcance de los daños por desprendimientos, caída de muros, árboles, planchas e inundaciones.
Asimismo, se recuerda que hay que tener muy en cuenta que cuando empiece la fase aguda del temporal, no solo habrá que permanecer totalmente resguardado, sino que la actuación de los medios estará también muy limitada, por lo que se atenderán las situaciones en las que haya riesgos para las personas, pero otras mucha, como las inundaciones, tendrán que esperar.
En cualquier caso, la situación más delicada podrá producirse los próximos miércoles y viernes, para cuando hay prevista otras dos borrascas.
El Ayuntamiento de Agüimes, ante la situación prevista, ha decidido suspender todas las actividades municipales para hoy, incluido el baile infantil del Carnaval del Cruce de Arinaga.