Jueves, 3 de julio.
Redacción
Los dos jóvenes detenidos como presuntos autores de la exfiltración de datos personales de altos cargos del Estado, políticos-as y periodistas, lanzaban el pasado lunes por la noche un mensaje en sus redes sociales anunciando que "hemos creado un canal de Telegram donde publicaremos todas las actualizaciones importantes de nuestra plataforma".
Estas actualizaciones, según informa el periódico La Provincia, serían los datos personales, entre otros, del Presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, algo que ya llevaban varios días haciendo en un chat afín a Alvise Pérez, líder de Se Acabó la Fiesta, a lo que se sumaría informaciones privadas de cualquier ciudadano-as previo pago por parte de las personas interesadas en consultarlos.
Seis horas más tarde del anuncio, un gran despliegue de la Policía Nacional liderado por la Comisaría General de Información (CGI) irrumpía en sus domicilios para proceder a su detención por orden de la Audiencia Nacional por un presunto delito de terrorismo.
La información privada era la base de su negocio, ya que, presuntamente, vendías los datos personales de los políticos por unos 200 euros en criptomonedas.
Eso es lo que sostiene la investigación de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional, que consideran a Yoel O.Q. como responsable de obtener las referencias de los altos cargos del Estado y del Gobierno y, gracias a la publicidad y trascendencia de las publicaciones, habría vendido ilícitamente el acceso a base de datos con información sensible, mientras que Cristian E.S.M. sería el encargado, presuntamente, de monetizar las actividades y de la gestión del monedero virtual en el que recibían los pagos.
El informa policial señala que los perfiles de los detenidos (Akkaspace y Pakito) no se escondían, publicaban datos reivindicando la posesión de la información y alardeaban de su capacidad paar venderlos, al tiempo que lanzaban mensajes amenazantes de futuras publicaciones, lo que ha sido considerado por la Policía Nacional como una "grave amenaza para la seguridad nacional".
Asimismo, de investiga si uno de los orígenes de la información publicada por los jóvenes, y que luego colgaban en plataformas como Doxbin y Wedox (webs que se utilizan para publicitar y comercializar con datos personales), podría ser una copia del censo electoral comercializada en Internet.
La estructura creada para estas actividades delictivas incluía el cobro mediante criptomonedas, lo que facilita el anonimato y dificulta el rastreo de los fondos obtenidos.
Horas después de ser detenidos, y tras finalizar los registros en los domicilios, en el Cruce de Arinaga y Arinaga, los jóvenes fueron trasladados en una avión oficial de la Policía Nacional a Madrid, donde hoy podrían prestar declaración ante el magistrado Francisco de Jorge, a cargo del Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional, por un presunto delito de ciberterrorismo, aunque ninguno cuenta con historial delictivo vinculado a ciberataques.
Estas actualizaciones, según informa el periódico La Provincia, serían los datos personales, entre otros, del Presidente del Gobierno de España, Pedro Sánchez, algo que ya llevaban varios días haciendo en un chat afín a Alvise Pérez, líder de Se Acabó la Fiesta, a lo que se sumaría informaciones privadas de cualquier ciudadano-as previo pago por parte de las personas interesadas en consultarlos.
Seis horas más tarde del anuncio, un gran despliegue de la Policía Nacional liderado por la Comisaría General de Información (CGI) irrumpía en sus domicilios para proceder a su detención por orden de la Audiencia Nacional por un presunto delito de terrorismo.
La información privada era la base de su negocio, ya que, presuntamente, vendías los datos personales de los políticos por unos 200 euros en criptomonedas.
Eso es lo que sostiene la investigación de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional, que consideran a Yoel O.Q. como responsable de obtener las referencias de los altos cargos del Estado y del Gobierno y, gracias a la publicidad y trascendencia de las publicaciones, habría vendido ilícitamente el acceso a base de datos con información sensible, mientras que Cristian E.S.M. sería el encargado, presuntamente, de monetizar las actividades y de la gestión del monedero virtual en el que recibían los pagos.
El informa policial señala que los perfiles de los detenidos (Akkaspace y Pakito) no se escondían, publicaban datos reivindicando la posesión de la información y alardeaban de su capacidad paar venderlos, al tiempo que lanzaban mensajes amenazantes de futuras publicaciones, lo que ha sido considerado por la Policía Nacional como una "grave amenaza para la seguridad nacional".
Asimismo, de investiga si uno de los orígenes de la información publicada por los jóvenes, y que luego colgaban en plataformas como Doxbin y Wedox (webs que se utilizan para publicitar y comercializar con datos personales), podría ser una copia del censo electoral comercializada en Internet.
La estructura creada para estas actividades delictivas incluía el cobro mediante criptomonedas, lo que facilita el anonimato y dificulta el rastreo de los fondos obtenidos.
Horas después de ser detenidos, y tras finalizar los registros en los domicilios, en el Cruce de Arinaga y Arinaga, los jóvenes fueron trasladados en una avión oficial de la Policía Nacional a Madrid, donde hoy podrían prestar declaración ante el magistrado Francisco de Jorge, a cargo del Juzgado Central de Instrucción número 1 de la Audiencia Nacional, por un presunto delito de ciberterrorismo, aunque ninguno cuenta con historial delictivo vinculado a ciberataques.
Ayer les leyeron sus derechos en el Registro Central de Detenidos de Moratalaz (Madrid), donde los detenidos han permanecido mientras se ha conocido que la Comisaría General de Información (CGI) de la Policía Nacional determina que no fueron los autores de ataques informátivos contra miembros del Gobierno de España ni contras las personas afectadas, sioo que habían explotado vulnerabilidades previamente existentes en sistemas de empresas e instituciones, desde donde extrajeron grandes cantidades de datos personales.
El principal investigado, Yoel O.Q., según recogía ayer Canarias7 en su edición digital, y de acuerdo también a una publicación en TikTok del periodista José Sánchez de Voz Populi, ofreció una entrevista en la que se presentaba como una especie de "Robin Hood que actúa por el pueblo y contra la corrupción del PSOE".
Además, llegó a manifestar antes de ser apresado que era consciente de que estaba siendo investigado y, lejos de cesar con la actividad, señala Canarias7, declaró también que esperaba que le metiesen "en la misma celda que a Pedro Sánchez".