Redacción
Un grupo de madres y padres de alumnos-as del CEIP Roque Aguayro de Agüimes se concentraron ayer ante el ayuntamiento para protestar y mostrar su condena a las agresiones que sufren por parte de una madre, tanto físicas como verbales.
El Ayuntamiento de Agüimes, a cuyas instalaciones a acudido también esta mujer en alguna ocasión para amenazar a los trabajadores-as municipales, ha presentado cuatro informes ante la Fiscalía porque el problema se ha extendido a todo el municipio, ya que las agresiones se suceden fuera del ámbito escolar y llegando a cualquier otro lugar como supermercados, calles, plazas, centro de salud, etc.
Las personas convocantes de la manifestación, madres y padres que han sido víctimas directas de las agresiones, o bien que lo han sido sus hijos-as, señalan que son ya dos años de agresiones psíquicas y físicas y que muchas de las denuncias interpuestas han sido archivadas, mientras que otras están en trámites.
La comunidad escolar del CEIP Roque Aguayro de Agüimes, que agradece el apoyo municipal porque "nos encontramos ante un problema que torna en inseguridad", se muestran impotentes ante lo que, afirman, "es un calvario que vivimos día a día".
Asimismo, muestran su malestar por la falta de respuesta judicial, que está tratado el caso, aseguran, como simples "problemas vecinales", por lo que quieren unificar todas las denuncias presentadas y actuar en bloque para poner fin, de una vez por todas, a este conflicto y poder acudir al colegio o salir a la calle con sus hijos-as sin miedo.
El Ayuntamiento de Agüimes, a cuyas instalaciones a acudido también esta mujer en alguna ocasión para amenazar a los trabajadores-as municipales, ha presentado cuatro informes ante la Fiscalía porque el problema se ha extendido a todo el municipio, ya que las agresiones se suceden fuera del ámbito escolar y llegando a cualquier otro lugar como supermercados, calles, plazas, centro de salud, etc.
Las personas convocantes de la manifestación, madres y padres que han sido víctimas directas de las agresiones, o bien que lo han sido sus hijos-as, señalan que son ya dos años de agresiones psíquicas y físicas y que muchas de las denuncias interpuestas han sido archivadas, mientras que otras están en trámites.
La comunidad escolar del CEIP Roque Aguayro de Agüimes, que agradece el apoyo municipal porque "nos encontramos ante un problema que torna en inseguridad", se muestran impotentes ante lo que, afirman, "es un calvario que vivimos día a día".
Asimismo, muestran su malestar por la falta de respuesta judicial, que está tratado el caso, aseguran, como simples "problemas vecinales", por lo que quieren unificar todas las denuncias presentadas y actuar en bloque para poner fin, de una vez por todas, a este conflicto y poder acudir al colegio o salir a la calle con sus hijos-as sin miedo.