Domingo, 07 de febrero.
El Ayuntamiento de Agüimes, según un informe del Registro Canario de Identificación Animal, tiene actualizado, a día de hoy, el censo municipal de animales de compañía.
El Ayuntamiento de Agüimes, según un informe del Registro Canario de Identificación Animal, tiene actualizado, a día de hoy, el censo municipal de animales de compañía.La Gerente de Zoocan, iniciativa del Consejo de Colegios Veterinarios de Canarias, Alicia Arteaga (en la imagen), explicó que los ayuntamientos están obligados por ley a tener un censo de estos animales, a la vez que remitirlo al Gobierno de Canarias y, en el caso de los animales potencialmente peligrosos, a la Dirección de Seguridad y Emergencias.
El censo de animales de compañía se elabora gracias a los convenios de colaboración entre los ayuntamientos y el Consejo de Colegios de Veterinarios, por un coste que varía entre 950 y 7.512,65 euros al año, en función del censo de población de cada municipio.
Con estos convenios se mantienen al día, en tiempo real, los datos sobre identificación en cada uno de los municipios, evitando a los propietarios de los animales desplazamientos hasta las dependencias del ayuntamiento para dar de alta a las mascotas. Sin este tipo de servicio, es fácil que los propietarios no acudan a su ayuntamiento para concretar el trámite legal obligatorio.
Uno de los problemas que plantea el no censar, es que no se dispone de un registro de animales peligrosos, para los que es preciso tener una licencia que dan los ayuntamientos. En muchos casos, no están censados ni el 5% de los animales potencialmente peligroso de los municipios y, por tanto, no se han expedido las obligadas licencias a sus propietarios.
A veces, los ciudadanos no saben que sus perros son peligrosos, pues ignoran que en esa categoría figuran las razas pit bull terrier, stafford bull terrier, american staffodshire terrier, rottweiler, dogo argentino, fila brasileiro, tosa inu y akita inu. Pero también lo son los de otras razas que cumplan cinco de ocho requisitos establecidos en el anexo II del reglamento que desarrolla la ley de animales potencialmente peligrosos.